UFC 321: Mackenzie Dern vs Virna Jandiroba

Buenos días a todos. Este fin de semana la UFC vuelve a pisar Abu Dhabi, lo que nos permite a los fans españoles poder gozar de uno de los mejores eventos del año sin tener que trasnochar. La cartelera tendrá dos cinturones en juego, y nosotros vamos a centrar nuestra atención en el menos llamativo de ambos.

Una nueva corona

Siempre he defendido que la UFC tiene tratos de favor con aquellos luchadores que quiere que triunfen. Así ha sido con múltiples estrellas que se han beneficiado de esta ayuda en la sombra. No hablo de amaños, ni mucho menos. Pero si de ayudas en forma de emparejamientos favorables. El resto ya depende del propio luchador. Y el caso de Mackenzie Dern es un nuevo ejemplo de ello.

La flamante reina de la división, Weili Zhang ha dejado su título vacante para enfrentarse a Valentina Shevchenko en una batalla entre campeonas. Mackenzie Dern no era la peleadora que más se merecía esta oportunidad. Tiene muchas carencias y hasta tengo serias dudas de que sea una Top 5. Sin embargo, la UFC ha encontrado la oportunidad y la pareja perfecta para convertirla en campeona.

Curiosa mezcla de estilos en donde las dos luchadoras son magníficas grapplers, pero cuentan con innumerables fallas en el resto de facetas.

Ambas luchadores ya se vieron las caras en 2020 y Mackenzie salió con el brazo en alto tras tres competitivos asaltos. En aquel entonces, llegaron igualadas al tercer asalto, y fue el volumen y la garra de Mackenzie lo que le dio la victoria. Ambas han evolucionado desde entonces. Sin embargo, aquella pelea nos dejó una clara imagen de como puede desarrollarse esta revancha.

La dependencia del control

Virna Jandiroba siempre ha sido una grappler de máxima eficiencia posicional. Cuando consigue derribos, su dominio desde la cima es capaz de apagar la ofensiva de cualquier rival. Pero su juego es rígido. Se apoya en un wrestling funcional, no especialmente explosivo, y su striking es de lo más limitado de la categoría. Si no puede marcar los tiempos desde el suelo, su producción ofensiva se reduce drásticamente.

El problema para Jandiroba es que, frente a una rival con un perfil tan parecido, su plan pierde claridad. Mackenzie Dern no será perfecta, pero ofrece respuestas en todos los escenarios imaginables a ras del suelo. En el primer enfrentamiento ya vimos síntomas de esa dependencia. Control posicional sin daño, sin progresar y sin generar una amenaza real.

La incomodidad en el golpeo

Históricamente, cuando dos grapplers de elite se enfrentan, sus habilidades suelen cancelarse y terminamos viendo un intercambio de golpes bastante descafeinado. El golpeo de Dern ha sido criticado con razón durante años. Pero dentro de sus limitaciones, no podemos negar que Mackenzie es una striker mucho más peligrosa.

Irregular, anárquica en ocasiones, pero con volumen y una actitud ofensiva constante que puede romper el ritmo lento que necesita Jandiroba. La brasileña nunca ha mostrado grandes mejoras en esta faceta de su juego. Es un ámbito en donde siempre se le ha visto incómoda, y a sus 37 años dudo mucho que pueda sorprendernos con algún tipo de arma nueva.

El golpeo de Mackenzie ha mejorado una barbaridad de la mano del entrenador Jason Parillo y creo que la ventaja en sus pies será determinante a ojos de los jueces.

Creo que Virna encontrará posiciones favorables, pero Dern sabe cómo sobrevivir desde su guardia. Forzará transiciones, buscará reversals y sus ofensivas puntuales sumarán más que el control sin daño de la brasileña. Cabe destacar que Jandiroba nunca ha competido a 5 asaltos dentro de la UFC, mientras que Dern tiene bastante experiencia en ese aspecto. Sabemos que su cardio es sólido, pero no tenemos esa certeza con Virna.

Espero una pelea bastante aburrida, con mucho control por parte de la brasileña que quedará eclipsado ante los cambios de ritmo de nuestra luchadora. Dern sabe cuando pisar el acelerador, cuenta con una ventaja física, aparte de ser la mejor striker por una vez en su carrera. Hace años jamás lo hubiera imaginado, pero creo que Mackenzie tiene el emparejamiento perfecto para convertirse en campeona del mundo.

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